The Hangmen, el 21 de diciembre, en el Dom Pedro

Dentro de unos días nos visitará la banda de uno de los grandes losers de la escena angelina de finales de los 80. Me estoy refiriendo al gran Brian Small y por consiguiente al grupo de su vida, THE HANGMEN. Tras unos años en los que el grunge hundió toda posibilidad de que otro tipo de música sobreviviera, nuestro protagonista logró rehabilitarse de sus peligrosas adicciones y resurgir en el nuevo milenio cuando editó su segundo disco, "Metallic I.O.U.", y por fin vio reconocida, aunque fuese a un nivel underground, la calidad que atesoraban sus temas. Pero hoy no quiero hablar de ese fantástico álbum. Estas palabras van dirigidas a su LP de debut. Un disco descatalogado del que las únicas copias que hay en el mercado se pagan a precio de oro. Brian no posee los derechos y cuando resucitó a la banda a principios de esta década decidió que esos enormes temas no podían caer en el olvido. Para ello sacó en el 2002 un directo basado casi exclusivamente en las canciones de su álbum de debut, dejando solo fuera la versión de los FLAMIN' GROOVIES “Slow Death” y añadiendo 3 temas del por entonces recién editado "Metallic I.O.U.". Hablamos de “We´ve got blood on the toes of our boots”, uno de mis directos favoritos de la historia del Rock´n´Roll, no solo por captar a la perfección el sonido crudo de la banda, sino por que por fin se le rinde justicia a esas joyas en forma de canciones que formaban parte de aquella obra maestra de las escena angelina. “The Hangmen” fue editado por Capitol Records en 1989, pero sus escasas ventas provocaron el despido de la banda por parte de la compañía. Producido por el legendario Vic Maile, contenía 12 temas como 12 soles. Una auténtica bomba de relojería cuyo único punto flaco es la falta de garra en la producción. Sólo hace falta ver como suenan los temas en el directo del 2002 comparados con la grabación en el estudio. Pero quién se puede quejar cuando nos plantan en la cara canciones tan redondas como “Desperation Town”, “Lonely”, “Coal Mine”, “Rotten Sunday” o “My Way”. Y podríamos seguir hasta enumerar todos los cortes del disco, no sobra ni falta nada. Todo ello aderezado con la aguda y personal voz de Small. Si todavía no habéis escuchado ninguna de estas fabulosas canciones, haceros en cuanto podáis con el directo del que hablaba unas líneas atrás. Y sobre todo ni se os ocurra perderos a estos tipos en directo. Como diría Bon Scott: “Satisfaction guaranteed”.

Os recordamos que podrán adquirirse las entradas anticipadas por 10 euros en la Librería Paradiso y el mismo Café Dom Pedro, en Gijón, y en Oviedo, en El Último Mono. El precio en taquilla será de 12 euros.