martes, 15 de marzo de 2011

"Keys to the kingdom" - NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS


Tras la muerte de su padre, Jim Dickinson, legendario productor y músico de Memphis, Luther y Cody Dickinson se reunen en la primavera de 2010, tras dejar por un momento aparcados sus proyectos paralelos THE BLACK CROWES y HILL COUNTRY REVUE, en el estudio de grabación de la familia, Zebra Ranch, en donde habían pasado incontables horas junto a su padre, para crear un disco que les ayudase a enfrentarse a la pérdida y, al mismo tiempo, regocijarse en su recuerdo. Jim siempre les había dicho: “Debeis tocar juntos, sois mejores tocando juntos que por separado”.

De esta manera apareció el 1 de febrero "Keys To The Kingdom", el nuevo trabajo de NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS, casi tres años de su anterior disco, "Hernando", editado a principios de 2008. Amigos muy cercanos a la familia se reunieron con la banda para ayudarles en esto momentos, entre ellos Mavis Staples, Ry Cooder, Spooner Oldham, Gordie Johnson o Jack Ashford. Todos habían colaborado con Jim y sus hijos a lo largo de los años en uno u otro momento y consideraban a la familia Dickinson como su propia familia, sentían una relación de parentesco.

A lo largo del disco se exploran diferentes formas de meditación sobre la muerte: “Se dice que la ira es la primera etapa del dolor y así es como empieza el álbum, enfadado”, dice Luther al referirse a las dos primeras canciones que abren el disco, "This A'way" y "Jumpercable Blues". Otras veces lo hacen desde la perspectiva de su padre y cómo se preparó para morir, como ocurre con "The Meeting", en donde cuentan con la colaboración de Mavis Staples, y hablan sobre la llegada a las puertas del cielo, "How I Wish My Train Would Come”, que habla del hecho de ir más allá de la lucha de la vida o “Hear The Hills”, una de las mejores del disco, que representa la aceptación y el dejarse llevar por la experiencia en los momentos finales de la vida. Spooner Oldham, el pianista favorito de Jim, les echó una mano en estas 2 últimas canciones, especialmente en "Hear The Hills": cuando la canción se acaba, suena como una iglesia en algún sitio lejano en el bosque. Luther explica la inspiración: "Cuando éramos pequeños, vivíamos en una casa al lado de una carretera entre un bar y un lago donde las iglesias locales celebraban bautizos. Recuerdo oir la música en la noche y los domingos por la mañana”.

Una de las versiones en el disco es “Stuck Inside Of Mobile With Memphis Blues Again”, de Bob Dylan. “Una noche, en el hospital, papá tuvo la gran idea de que “Stuck Inside...” podría ser tocada como una canción country-blues", dice Luther. “No podía hablar, entonces lo escribió en un trozo de papel y me lo dio. Le prometí que lo haríamos”.


“Let it Roll”, "Ol’ Cannonball” y “Ain’t None O’ Mine” son blues tradicionales que NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS han incluido en el disco. El primero es una nueva grabación de un tema que escribieron y grabaron 3 días después del fallecimiento de su padre. Estas canciones establecen el centro emocional del disco junto a ”Ain’t No Grave”, la última carta de amor de un hijo a su padre fallecido. La canción tocada a la guitarra por el gran amigo de Jim, Ry Cooder, es simultáneamente angustiosa y edificante. Cuenta Luther: “Me desperté una mañana en el bus de NMAS, y la letra de “Ain’t No Grave" me venía a la cabeza tan rápido como podía escribirla. Esa noche, después del show, cogí la guitarra, abrí el libro en el que escribo las letras de las canciones y la melodía me llegó fácilmente". La canción es brutalmente honesta y sincera.


El disco se cierra con 2 temas algo más ligeros sobre la muerte: ”New Orleans Walkin’ Dead” en donde se habla sobre la resurrección, y “Jellyrollin’ All Over Heaven” inspirada en las bandas de New Orleans y en la música alegre que tocan durante su desfile de vuelta desde el cementerio, en donde cuentan una vez más con Oldham al piano en la parte final del tema y del disco.


En los créditos del disco, el más personal e íntimo de todos los que han sacado hasta este momento, se puede leer "Producido por Jim Dickinson" como último homenaje a su padre. Ahora sólo quedar esperar poco más de dos meses para ver ese homenaje sobre los escenarios españoles. En concreto, el día 20 de mayo en la sala Acapulco, en Gijón. Todo un privilegio.


2 comentarios:

manel dijo...

Hemos coincidico en la banda de la entrada. Solo que yo me voy un poco más atrás..hasta el 2003...Este último disco es una maravilla. Como casi todo, que coño, todo, lo que hacen. Saludos.

Anónimo dijo...

"Producido para Jim Dickinson" dice realmente, lo cual aún lo hace más emotivo si cabe.